Villa Mandarine


El Hotel

Abandonamos el bullicio de la ordenada Rabat para sumergirnos en un jardín de mandarinos. Los árboles decoran cada vista desde las habitaciones de este hotel singular que es sin duda un favorito en la ciudad. La familia Claudy Imbert, francesa y con solera en el lugar, dirige el establecimiento, que ofrece además un restaurante de referencia, entre los mejores de Marruecos. El edificio es en una planta, salvo en la zona de alojamiento, en torno al patio árabe, que tiene dos. Las habitaciones se distribuyen en torno al patio y tienen balcón al jardín o terraza privada, y las suites dan a mediodía. Ese patio es un vergel con fuente rumorosa. Se empieza el día con otro espíritu al abrir la puerta y descubrir este jardín interior con palmeras, plataneras, palmitos y gorriones alegrando la mañana. El hotel cuenta con un bar de ambiente africano, y con un gran salón-biblioteca con chimenea y vistas al jardín.


Accesibilidad

El hotel es sin barreras arquitectónicas que reseñar y casi toda su superficie es en planta baja. Pasillo a las habitaciones con puerta de apertura automática. Dispone de señalética en braille y relieve en vinilo transparente en habitación adaptada para ceguera o baja visión. Aunque las habitaciones son de 36 metros cuadrados hasta entrado 2013 no dispondrá de habitación con baño adaptado para clientes con silla de ruedas.


¿Qué hacer?

 Actividades
En el hotel, paseos por el jardín, que tiene piscina exterior y piscina climatizada, y cancha de tenis. Mesa de ping-pong, terreno de petanca. Hammam y masajes. Salón de billar americano. Surf en las playas urbanas. Equitación y tres campos de golf a diez minutos del hotel. Visita de Rabat, de Casablanca y Meknés, a una hora, o de Fès, a hora y media, en coche o tren.
 Lugares que visitar
En Rabat, la Torre Hassan y Mausoleo de Mohamed V, la Kasbah de los Ouddayas, la medina. Excursiones a Casablanca, Fés y Meknés (en coche o en tren). En la kasbah, no te pierdas un té a la menta con pastas en el Café Moro, mientras contemplas desde el acantilado la ría que separa Rabat de Salé.
 Libros
- La Kasbah des Oudayas de Rabat. Un libro de buen formato con fotografía de Hélène DECUYPER y texto en prosa del escritor belga Patrick LOWIE. 15€ - Rabat Comment je suis devenue capitale. Obra del arquitecto Xavier Couplet, propone 14 rutas ilustradas por la ciudad. 16€ - Les Villes Impériales du Maroc. De Mohamed Métalsi, con fotos de Cécile Tréal et Jean-Michel Ruiz. 25€ - Recomendamos también los publicados por el médico francés Robert Chastel, erudito de la historia de Rabat.


Gastronomía

 Cocina
Internacional creativa, a manos del chef Sylvain Brucato, que añade su cuscús cada viernes en la carta. Está considerada una de las mejores mesas de Marruecos. La sala se abre a la terraza y el jardín, donde también se desayuna, un privilegio con eventual visita de los pavos reales. Precio medio sin bebidas, 240 dh almuerzo y 350 dh las cenas.
 Productos Típicos
En la medina o en el Centro Artesanal de Salé, alfombras, artesanía del metal, cerámica de Fes, preciosas mantelerías de algodón. Típicas pastas tradicionales marroquíes. Rabat tiene mejores precios que otras ciudades, por tener menos turismo de grupos.


Cómo llegar 


Galería