He aquí un hotel que ha tenido en cuenta la comodidad de todos en su planeamiento. Moderno y funcional, éste es uno de los hoteles más accesibles de la Costa Daurada. Cristal, líneas rectas, espacios luminosos para un establecimiento que sólo abre en primavera y verano y que tiene vocación costera. Abierto en 2015 a cien metros de la playa de Altafulla, ofrece 3.000 metros cuadrados de jardines, dos piscinas y una zona chill-out con música en vivo cada fin de semana.